07.03.22 Extracto del espectáculo Paraíso perdido, una creación de Patricia Guerrero y el violagambista Fahmi Alqhai. Piezas de música barroca sobre antiguas danzas con las que Patricia ha creado coreografías desde su lenguaje flamenco.
En la Sevilla del 1600 las fiestas del pueblo, sus cantes y bailes callejeros -en particular los de los negros asentados en barrios de la ciudad como San Bartolomé- seducían a las clases pudientes: un ambiente fascinante y pecador, atractivo pero gravemente censurado por los moralistas. Entre la aristocracia se pusieron de moda las danzas llegadas desde América por el puerto sevillano: folías, canarios, chaconas o la obscena zarabanda. Esas danzas iniciaron así caminos paralelos entre la inocencia y el vicio, barrocos claroscuros que inspiran este espectáculo.
Patricia Guerrero, Premio Nacional de Danza 2021 en la categoría de Intérprete, tiene profundas raíces flamencas, al tiempo que siempre ha explorado otros estilos de música y danza. En 2011 es elegida primera bailarina del Ballet Flamenco de Andalucía. En 2012 recibe el Giraldillo a la Artista Revelación de la Bienal de Sevilla. En 2016 estrena Catedral, galardonado con el Giraldillo a Mejor Espectáculo, y con dos nominaciones a los Premios Max 2017. En 2018 da otro salto de calidad con Distopía, nominada esta vez a tres Max. En 2020 llega Paraíso Perdido, espectáculo con el violagambista Fahmi Alqhai. En 2021 protagoniza La Bella Otero como bailarina invitada por el Ballet Nacional de España. En junio de 2022 se estrenará su nueva producción de gran formato, Deliranza.
FICHA ARTÍSTICA
PATRICIA GUERRERO: baile flamenco
FAHMI ALQHAI: viola da gamba
PABLO ÁRBOL: vestuario
JUAN DOLORES CABALLERO: dirección escénica
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