29.04.18

Al mirar los alumnos que hay en clase de danza, sea cual sea su estilo, uno observa que el número de niños es menor que el de las niñas. “¡Pues claro!”, pensarán mucho, como si eso fuera lo natural. “Pero… ¿por qué?”, pensamos nosotros...

Es una disciplina artística que carga lamentablemente con una serie de prejuicios y estereotipos que le aleja de los niños. Todo este peso invisible que lleva años flotando en el ambiente hacen que muchos niños, a pesar de disfrutar bailando, ni se planteen estudiarla por el qué dirán sus compañeros de colegio. Es casi impensable para muchos padres tenerla en consideración como actividad extraescolar. En muchas ocasiones, movidos los progenitores por miedo a que sus hijos sufra el temido ‘bullying’.

Pero lo cierto es que la danza es universal y tan humano como respirar. La necesidad imperiosa del ser por comunicarse y por formar parte de un grupo es la que ha llevado a los hombres y mujeres a bailar. La danza nos ha servido para todo a lo largo de la historia: para prepararnos para la guerra como los maorís y su haka, para pasarlo bien en la corte de Luis XIV en la Francia del siglo XVII, para curarnos como en el baile de la tarántula, cuyo ritmo era tan frenético que se creía que el sudor haría expulsar el veneno tras la picadura, o para seducir, como cualquier sábado noche.

La danza tiene unos beneficios enormes para el desarrollo del ser humano, a cualquier edad. Ayuda a sentirte cómodo con tu propio cuerpo, mejora la coordinación a edades tempranas, te da las herramientas para superar la timidez, a trabajar en equipo, a confiar en el otro, te inculca la cultura del esfuerzo y la superación, pero por encima de todas las cosas la danza te hace sentir bien. Y todo esto no entiende de géneros… ¿o sí? Que se dediquen profesionalmente a la danza es ya una decisión personal que sólo en su intimidad pueden decidir, pero ¿por qué privarles de antemano de algo tan beneficioso?

Así que… ¿por qué los niños eligen menos danza? Porque sin querer la sociedad y sus prejuicios les han alejado de ella… Pero cuando consiguen superar las barreras y recorrer ese largo camino que les separa y lo prueban, les aseguramos que les encanta. Porque bailar es vibrar, amar, reír, vivir. ¿Acaso no es eso universal? Feliz Día de la Danza, sea cual sea tu género y edad.





























Be sociable share - Se sociable. Comparte.


© Prohibida la reproducción total o parcial de textos, fotos y vídeos sin autorización escrita de sus autores.
(Los textos, fotos y vídeos utilizados en esta publicación son propiedad intelectual de sus autores y a los efectos previstos en el art.32.1, párrafo segundo, del TRLPI, se prohibe expresamente su reproducción, total o parcial, sin autorización previa por escrito.)